En este mundo cada vez más conflictivo y desafiante son muchos los que buscan la paz mental. Alcanzar la tranquilidad interior, tanto mental como espiritual y mantenerla resulta un reto permanente.
No existe una receta que funcione para todos por igual, sino que son tantas las maneras de alcanzarla como personas hay en el mundo. Lo que funciona para algunos, quizá no tenga efecto en otros.
Muchas dificultades que ocurren en tu día a día no las puedes cambiar; lo que sí puedes cambiar es tu actitud frente a estas.
La paz mental y su importancia
La paz mental se alcanza mediante un proceso de internalización de ti misma, de lo que eres. Podrás lograrla en la medida en que te hagas consciente de tus reacciones ante todo lo que te rodea.
Por eso debes tener claro que esa paz interior no está relacionada con elementos externos.
Más bien depende de la forma en que decidas llevar tu vida. Estar en calma bajo la presión de la familia, el trabajo, la economía, no es fácil, pero tampoco imposible.
Igualmente, ten en cuenta que esa paz es inseparable de la salud mental y en consecuencia de la salud física. Evitar que aparezcan enfermedades que afectan la cotidianidad debe ser parte de la motivación para que la encuentres.
Obstáculos que te impiden tener paz
Querer agradar a los demás, buscar constantemente la aprobación de otros son obstáculos que impiden alcanzar la paz mental.
Ser perfeccionista por el afán de proyectar una imagen impecable de ti misma, también imposibilita que estés tranquila.
Además, compararte con otras personas, estar en una competencia permanente y criticarte por no obtener lo que quieres, te hacen más difícil el camino hacia tu tranquilidad.
Encuentra tu paz interior
Lo primero que debes hacer es conocerte muy bien. Observa qué te impide en este momento encontrar tu paz mental.
A partir de esa observación y reconocimiento, trabaja en la forma de estar a gusto contigo misma.
Hazlo con paciencia porque los cambios profundos no se dan de la noche a la mañana.
No obstante, hazlo con la certeza de que ante las muchas de las dificultades del día a día que te roban la paz es posible reaccionar de manera distinta.
Ten en cuenta el bienestar que te trae la calma interior: serás más tolerante, comprensiva, agradecida y positiva. Percibirás cada dificultad como una oportunidad para crecer espiritualmente.
Si realmente buscas tu paz mental, enfócate permanentemente en estos aspectos; sin importar el ámbito en el que te encuentres:
Acéptate como eres
No importa lo que piensen de ti. Sé tú misma con tus defectos y virtudes. Tampoco intentes parecerte a nadie. Piensa que eres un ser único con toda la libertad de vivir tu vida como quieras.
Preocúpate menos
Los problemas siempre van a existir, pues son inherentes al ser humano. El reto está en cómo los afrontas y observar si preocupándote logras resolverlos eficazmente.
Es mejor actuar de manera efectiva y dejar menos tiempo a los lamentos y las angustias.
Vive el aquí y el ahora
Piensa que el pasado es algo que está en tu memoria y que el futuro está en tu imaginación.
Por lo tanto, debes vivir el presente, con la mirada en el futuro para tu crecimiento personal, pero con pisadas firmes que te lleven hacia esa vida que proyectas.
Ejercítate
Practica alguna actividad física que te saque por unos momentos al día de las angustias cotidianas.
Si esa actividad la haces al aire libre será mucho mejor, porque estarás conectándote con la naturaleza.
Sé positiva
Procura no quejarte y más bien sé una persona positiva.
Visualiza y apóyate en lo bueno de tus facultades, recursos, cualidades, oportunidades para mantener la paz mental ante cualquier adversidad.
Comments